Lo que más me gustó es que la tuvieran en un cubo de madera. La sacan con una paleta, la envuelven en papel de cera, nada de plásticos. Luego, al probarla, también la encontré muy buena, muy suave y blanda. La compré en el Mercado de Chamartín.
La consistencia de la mantequilla depende en gran parte de la alimentación de las vacas. Cuando la dieta es rica en grasas poliinsaturadas (pasto fresco) la mantequilla es más blanda. También depende del proceso de elaboración (temperaturas, amasado, etc.). La mantequilla de Isigny procede de nata fermentada durante 16-18 horas a una temperatura de 18ºC a 22ºC. Esta maduración de la nata favorece el desarrollo de los aromas. A continuación se hace el batido para separar los granos de grasa que se escurren y se amasan durante 15 minutos.
Esta mantequilla normanda tiene denominación de origen, bajo la cual sólo se autorizan métodos tradicionales de elaboración (Normandía y Bretaña tienen fama en la elaboración de mantequilla desde la Edad Media). No se permite la utilización de natas reconstitudas o congeladas y tampoco antoxidantes, colorantes ni correctores de acidez. Total, un pequeño lujo.