Hay algunas especias que en España no nos son muy familiares. Es el caso del cardamomo, que pese a conocerse en Europa desde la Edad Media no es muy utilizado en las recetas tradicionales de cocina española. Sin embargo, olerlo es una grata sorpresa y enseguida surgen ideas para incorporarlo a nuestros platos.
Qué es el cardamomo
Es el fruto desecado de la Elettaria cardamomum. Los frutos se recolectan antes de la madurez y se dejan secar hasta que quedan como unas cápsulas duras y de color verde o gris verdoso. Algunas son más claras ya que en ocasiones se blanquean antes de comercializarlas. Cada fruto tiene tres compartimentos llenos de diminutas semillas. Estas semillas son las responsables de su delicioso olor, que recuerda al limón, la menta y al eucalipto, así como de su sabor ligeramente picante.
Junto con la vainilla y el azafrán es una de las especias más caras. India es el principal productor, seguido por Guatemala, Sri Lanka y Tanzania.
Historia del cardamomo
Está documentado que hacia el siglo IV a.C. los griegos comerciaban con unas especias llamadas amomon y kardamomon, también empleadas más tarde por los romanos, pero no hay seguridad de que fueran el mismo que nosotros conocemos. Éste se importa de la India y Sri Lanka desde hace más de 1000 años.
Compra y conservación del cardamomo
En España no es una especia frecuente. Se puede encontrar en herbolarios o en supermercados ecológicos. Se presenta tanto entera como molida.
Es importante comprobar que las cápsulas tienen un color verde o blanquecino, ya que hay diferentes clases. Los frutos marrones más grandes y de aroma más fuerte proceden de otras variedades de inferior calidad.
Para que el cardamomo se conserve bien conviene guardarlo en un tarro de cristal hermético.
Propiedades medicinales del cardamomo
Se considera un buen digestivo y un alivio para las molestias estomacales. Por ello en la India se añade al té y en los países árabes se ponen dos o tres cápsulas en el café. También se mastica a veces para combatir el mal aliento.
Utilización en la cocina
El cardamomo se emplea tanto en platos dulces como salados, generalmente de estilo oriental, como currys indios, guisos y encurtidos. Es delicioso en los dulces de frutas.
En Europa es más popular en las cocinas alemana y escandinava, donde se utiliza en panes y bizcochos y también en algunos encurtidos.
Por mi parte recomiendo aplicar el olfato y usarlo en lo que más nos guste.
Recetas con cardamomo
Estas recetas sencillas son un buen ejemplo de cómo utilizar esta especia sin complicarse en absoluto:
Jamón asado a la naranja y cardamomo
Pollo de corral en su jugo con cardamomo
