Verdinas con sepia: un potaje ligero

Como llamando a las primeras lluvias, que en Madrid están tardando un poco, aquí va el primer potaje. Potaje ligero, eso sí, hasta que el frío no arrecie no toca sacar el tocino ni la panceta y unas verdinas con sepia le sientan como un guante a la estación.

Os aconsejo que utilicéis sepias frescas, buenas, de las que vienen sin limpiar. Las otras suelen ser descongeladas y el sabor no merece la pena. Porque lo que tiene la sepia es que da un sabor muy intenso a todo. Arroces, pasta, guisos o potajes como este quedan con un estupendo sabor a mar sin mucho esfuerzo, ni culinario, ni económico.

La receta

Dificultad: Fácil | 3 horas [activo: 30 minutos]

Ingredientes

[4 personas] 300 g de verdinas • 500 g de sepia • 1 cebolla • 2 dientes de ajo • 2 tomates • 2 zanahorias • 1 rama de apio • 1 verde de puerro • 5 cs de aceite de oliva virgen extra • caldo de pescado • 8 hebras de azafrán • sal

[una persona] 75 g de verdinas • 125 g de sepia • 1/4 de cebolla • 1/2 diente de ajo • 1/2 tomate • 1/2 zanahoria • 1 trocito de apio • 1 trozo de verde de puerro • 1 cs de aceite de oliva virgen extra • caldo de pescado • 2 hebras de azafrán • sal

Elaboración de las verdinas con sepia

Poner las verdinas a remojar en abundante agua fría la noche anterior.
Picar la cebolla y las zanahorias. Pelar y picar el tomate. Atar el verde de puerro y el apio. Aplastar los ajos.
Limpiar la sepia y cortarla en trozos de 2-3 cm.
Poner al fuego una olla con el aceite y sofreír la cebolla y la zanahoria hasta que estén blandas y empiecen a dorarse. Añadir el tomate, el azafrán y el ajo y continuar sofriendo a fuego medio hasta que esté muy hecho todo.
Añadir la sepia y saltear hasta que cambie de color. Escurrir las verdinas y agregarlas a la olla junto con el caldo suficiente para cubrirlas y un tercio más. Añadir el atado de apio y puerro y sazonar con sal.
Cuando hierva, bajar el fuego y cocer a fuego muy lento hasta que las verdinas estén tiernas.