Una crema de calabacín de toda la vida pero con un gusto diferente gracias a los espárragos.
En muchas recetas de crema de verduras, estas se rehogan previamente solas o con algún aditamento como cebolla. También están muy ricas, pero el hervido por las buenas tiene como resultado una limpieza de sabores que me encanta.
La receta
Ingredientes
[seis personas]
1 kg de calabacines • 1 bote de 250 g de espárragos blancos • 200 ml de nata líquida • aceite de oliva v.e. • sal • pimienta negra molida • 1 cs de avellanas tostadas
Elaboración de la crema de calabacín y espárragos blancos
- Lavar los calabacines y cortarlos en rodajas finas sin pelar. Poner las rodajas de calabacín en una olla junto con los espárragos y el líquido de la lata. Terminar de cubrir con agua.
- Poner la olla al fuego y sazonar con sal y un chorrito de aceite. Llevar a ebullición y cocer hasta que los calabacines estén hechos.
- Escurrir una tercera parte del agua (más o menos) y triturar muy finamente el contenido de la olla. Normalmente no es necesario, pero si quedan hebras habrá que pasar la crema por el chino.
- Volver a poner la olla al fuego y añadir la nata. Cocer un minuto. Probar y rectificar de sal y añadir pimienta negra molida al gusto.
- Servir en cuencos individuales con un adorno de avellanas picadas y un hilo de aceite de oliva virgen extra de muy buena calidad.
Notas
Puede aumentarse la cantidad de espárragos y pelar los calabacines, de este modo la crema será al revés: de espárragos y calabacines, y muy rica también.
[1 ct = 1 cucharadita = 5 ml • 1 cs = 1 cucharada = 15 ml • 1 taza = 250 ml • Temperaturas siempre en ºC • calcular cantidades]