Esta receta de crêpes rellenas de puerro es una elegancia francesa, pero en un paquete simple y nutritivo. Estas crêpes, rellenas de una mezcla cremosa y aromática, son ideales para la cena cualquier noche de la semana, pero también funcionan como un aperitivo impresionante, sofisticado y fácil de preparar para invitados.
Ingredientes (para 6 personas)
Para las crêpes:
- 250 g de harina
- 500 ml de leche
- 3 huevos
- 30 g de mantequilla derretida
- Una pizca de sal
Para el relleno:
- 3 puerros grandes
- 1½ tazas de berros frescos
- 100 g de crème fraîche
- 30 g de panceta ahumada
- 1 cucharada de mostaza común
- 40 g de queso semicurado rallado
- 30 g de queso parmesano finamente rallado
- 3 cucharadas de aceite de oliva o mantequilla
- Sal kosher y pimienta negra recién molida
Preparación:
Para las crêpes:
En un bol grande, mezcla la harina y una pizca de sal. Haz un hueco en el centro y añade los huevos. Comienza a batir y añade la leche hasta obtener una masa suave sin grumos. Incorpora la mantequilla derretida, mezcla bien y deja reposar la masa durante al menos 30 minutos en el refrigerador.
Prepara una sartén antiadherente de unos 25 cm de diámetro. Añade una capa fina de masa (alrededor de un cucharón) e inmediatamente gira la sartén para que el fondo quede completamente cubierto. Cocina a fuego medio-alto hasta que los bordes se doren. Dale la vuelta a la crêpe y cocina el otro lado durante unos 30 segundos. Continúa hasta que se acabe la masa, apilando las crêpes en un plato con papel de hornear entre ellas para que no se peguen.
Para el relleno:
Comienza preparando los puerros. Retira la primera capa exterior, recorta las puntas y la parte verde oscura (que se puede guardar para caldos). Lávalos bien para eliminar la suciedad y córtalos muy finos, alrededor de 1 cm.
Corta la panceta en dados pequeños de medio centímetro. En una sartén mediana, calienta el aceite de oliva (o derrite la mantequilla) a fuego medio y añade la panceta. Cuando comience a soltar su grasa, añade los puerros. Baja el fuego y rehoga lentamente durante unos 15 minutos, removiendo a menudo, hasta que los puerros estén suaves y translúcidos sin mucho dorado.
Mientras tanto, lava los berros y córtalos finamente. Combina la crème fraîche con los berros picados y el queso semicurado en dados pequeños en un bol.
Retira la sartén del fuego y añade una buena pizca de sal (con cuidado, ya que la panceta añade sal), pimienta recién molida y la cucharada de mostaza a la antigua a los puerros. Deja enfriar ligeramente la mezcla y luego añade al bol con los berros y la crema. Combina todos los ingredientes y mezcla con los dedos hasta obtener un relleno homogéneo.
Montaje:
Precalienta el horno a 200 °C y forra una bandeja con papel de hornear.
Coloca una crêpe en una superficie plana y esparce aproximadamente una sexta parte del relleno en la mitad de la crêpe, para formar una media luna. Dobla la otra mitad de la crêpe sobre el relleno y vuelve a doblar sobre sí misma por la mitad, formando un triángulo. Repite para las demás crêpes y el relleno.
A medida que llenes las crêpes, colócalas en la bandeja preparada. Pincélalas ligeramente con aceite de oliva o mantequilla derretida y espolvorea el queso parmesano rallado por encima.
Introduce la bandeja en el horno y gratina durante 5-7 minutos, hasta que el queso se derrita y comience a dorarse un poco.
Sirve de inmediato, acompañado si lo deseas, de una pequeña ensalada verde aderezada con una vinagreta de mostaza.
Nota: Si estás corto de tiempo, puedes hacer las crêpes con antelación y refrigerarlas hasta dos días, apiladas entre hojas de papel de hornear. También puedes preparar el relleno con antelación, por lo que es un plato ideal para servir cuando tienes invitados.
